La alcaldía de Gustavo Petro está entregando los refrigerios escolares en estado de descomposición poniendo en riesgo la salud de los menores.
El consorcio Plaza Mayor es el encargado de proveer los alimentos a los niños y niñas de la ciudad. No obstante, los refrigerios no son los adecuados: moho en las tortas de zanahoria y queso, malos sabores en las bebidas, menor cantidad en las porciones y cambios en el menú que se había pactado al inicio del contrato.
Para completar, el contrato tiene sobrecostos de 4.600 millones de pesos.