Una de las empresas públicas más importantes del país fue vendida la empresa canadiense Brookfield por tan solo $ 6,48 billones de pesos para supuestamente pagar la financiación de las vías 4G.

Muchos sectores insistieron en que esa venta no era necesaria y que, por el contrario, el país estaría perdiendo una empresa rentable y el patrimonio de los colombianos.

El gobierno Santos no hizo caso y el 13 de enero de 2016 vendió a Isagén.

Ahora resulta que el consejo de ministros redujo los gastos del gobierno en $ 6 billones de pesos, los mismos en los que fue vendida Isagen.

Lo que sugiere que la venta no era necesaria.

Además, desde junio de 2015 las empresas concesionarias para la construcción de las vías 4G ya estaban listas para poner la plata que se requería, respaldada con préstamos bancarios.

La primera parte contempla 10 obras que ya estaban adjudicadas y listas para iniciar obra.

La Agencia Nacional de Infraestructura confirmó que contratistas privados también financiarán algunas de las vías que faltan.

Si los constructores privados están poniendo la plata para los proyectos viales, y si financiar esos mismos proyectos fue la excusa del gobierno Santos para vender la hidroeléctrica, entonces ¿qué se hizo la plata de la venta de Isagen?

23 de febrero de 2016.