57 vehículos de la policía de Bogotá están sin función alguna porque el Fondo de Vigilancia y Seguridad no ha desembolsado la plata para retirar los automotores de los talleres.
Mientras los ciudadanos tienen que enfrentarse todos los días a la inseguridad que hay en la ciudad, la policía está sin recursos para poder patrullarla por negligencia de la alcaldía de Petro.
Las localidades que se han visto afectadas por la falta de los vehículos son: Engativá, Usaquén, Fontibón y Kennedy.
Entre los automotores hay camiones de la UPJ (Unidad Permanente de Justicia) y camionetas de los CAI móviles.