La Cámara Colombiana de Infraestructura (CCI) dice que existen las leyes y mecanismos para sancionar a los contratistas que incumplen con las obras en Bogotá pero que Petro no las utiliza.
La ley blinda los recursos públicos de la ciudad y ofrece varias opciones: imposición de multas, terminación anticipada del contrato y/o la supresión del mismo.
Sin embargo, la ley no aplica en situaciones en que las obras y los proyectos no tuvieron una debida planeación de los trabajos. Un ejemplo es el deprimido de la calle 94 con NQS.
Es así como la improvisación y la complicidad de Petro con los contratistas ha derrochado los recursos de Bogotá y la imposibilidad de una mejor ciudad.