Los contratos para la representación jurídica de la empresa se han rotado entre tres conocidos amigos sin tener en cuenta los protocolos y leyes de contratación.
El director de atención legal de la ETB, Iván Calixto González, le ha dado contratos por 1.500 millones de pesos a su exsocio y amigo Ricardo Aristizábal Escobar.
Estos negocios han tenido el aval de Javier Gutiérrez, el Secretario general de la ETB. Los tres personajes son amigos desde la universidad y han sido socios en la creación de una firma de abogados.
El 88 % de la ETB es propiedad de los bogotanos y maneja multimillonarios recursos. Por ello, tiene un código de ética en el que se obliga a abstenerse de adjudicar contratos si existe “vínculo de familiaridad, afinidad, amistad o relación comercial”.
La entidad cuenta con 12 abogados especializados, sin embargo, desde que llegó Iván González, la mayoría de contratos los ha adjudicado a su conocido Aristizábal que es externo a la empresa.
Javier Gutiérrez llegó a la ETB en enero de 2012 por recomendación de Gustavo Petro al empezar su alcaldía.
Saúl Kattan el presidente de la ETB ha tolerado este regalo entre amigos sin haber hecho nada para evitarlo.